Con dos velas de mocos se suscribe 100% al artículo publicado en ABC, firmado por Francisco Pérez del que destacamos los siguientes parrafos:
La Federación Española le ha hecho un caño en toda regla al Sevilla mandándolo a jugar la final de la Copa del Rey a Barcelona, que era la exigencia del Atlético de Madrid.
La desvergüenza de la Española es memorable y su decisión, injusta a sabiendas de que lo es, porque siempre, salvo designación con muchos meses de antelación, se ha escogido una sede equidistante de los dos clubes finalistas con el fin de no discriminar ni económicamente ni en movilidad a una de las aficiones. Resulta obvio que a los aficionados sevillistas se les perjudica de manera bien notable: en el mejor de los casos el desplazamiento les va a costar el doble en dinero y en tiempo empleado; serán muchos, además, los que deban pernoctar en Barcelona a costa de tener que pedir días de sus vacaciones. Eso si les dan permiso.
La decisión federativa, por desleal con el deporte y con Sevilla, merecería una respuesta contundente de la Federación de Peñas Sevillistas o de los accionistas del club blanco. No en forma de comunicado, que los okupas de Las Rozas se pasarían por el forro de los chándales, sino de denuncia en el juzgado.
domingo, 18 de abril de 2010
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